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Las Lágrimas Podrían Pronto Alimentar Lentes de Contacto de Realidad Mixta
Investigadores de la Universidad Tecnológica de Nanyang (Singapur) han logrado un avance significativo en el desarrollo de lentes de contacto de realidad mixta. Han conseguido incrustar una batería miniaturizada dentro de un lente de contacto especializado que tiene solo 0,5 mm de grosor, con la batería ocupando apenas 0,2 mm alrededor de la periferia.
Más allá de la maravilla de tal miniaturización, la invención de los investigadores cuenta con varias características ingeniosas. La batería puede cargarse de tres maneras distintas: mediante el método convencional de enchufarla a una fuente de energía, recargándola químicamente en una solución salina biocompatible (logrando un 80% de carga después de ocho horas de inmersión) y mediante un innovador proceso electroquímico que aprovecha la glucosa presente en las lágrimas humanas.
Aunque el rango de voltaje actual de 0.3V a 0.6V puede parecer insuficiente para lentes de contacto de realidad mixta completamente desarrollados, este avance allana el camino para desarrollar interfaces sin precedentes con reinos virtuales. Estas interfaces podrían permitir el acceso a información en tiempo real y la integración sin problemas con computadoras, teléfonos inteligentes y asistentes de IA de próxima generación.
En nuestro mundo contemporáneo, donde los avances tecnológicos ocurren a un ritmo vertiginoso, el límite entre la ciencia ficción y la realidad tangible se vuelve cada vez más difuso. En medio de las fervientes discusiones sobre la inteligencia artificial (IA) y su importancia estratégica, la realidad mixta (RM) y la realidad virtual (RV) se anuncian como el futuro de la computación, los videojuegos, las guías técnicas y la gestión de inventarios, entre otras aplicaciones.
Empresas como Microsoft (HoloLens), Meta (Quest) y Sony (PSVR 2) han presentado auriculares cada vez más sofisticados. Vision Pro, recientemente presentado por Apple, ejemplifica una interfaz de RM altamente refinada y un diseño ergonómico. Sin embargo, aún quedan obstáculos significativos antes de que estos productos puedan revolucionar verdaderamente las experiencias de realidad mixta, incluyendo su peso, generación de calor, volumen y desconexión del mundo exterior.
Además, sus capacidades de batería a menudo se quedan cortas, limitando su utilidad (aunque la experiencia relativamente incómoda puede hacer que la típica duración de batería de dos horas sea suficiente). Superponer una interfaz directamente en lentes de contacto presenta una alternativa atractiva para tales tecnologías, especialmente si se pueden abordar adecuadamente los desafíos de alimentar estos dispositivos.
No obstante, se requieren numerosos avances adicionales para realizar completamente el concepto. Estos incluyen el desarrollo de otros componentes miniaturizados esenciales para la realidad mixta, como chips MEMS para posicionamiento, sensores de video ambiental y comunicación inalámbrica con una unidad de procesamiento central que maneje la mayor parte del trabajo.
A medida que aumentan las preocupaciones sobre los riesgos asociados con la aparición de la Inteligencia Artificial General (IAG), una inteligencia artificial verdaderamente universal, generativa y autoaprendizaje, hay una cierta ironía en la idea de que nuestras lágrimas puedan algún día literalmente alimentar la pantalla de elección para estos sistemas avanzados.