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Venezuela denuncia el bloqueo de Estados Unidos como un acto de agresión
Venezuela ha denunciado el nuevo bloqueo naval impuesto por Estados Unidos como un acto de guerra, calificándolo como una violación directa del derecho internacional y de su soberanía. El anuncio, hecho por Washington como parte de una campaña más amplia de sanciones, ha provocado una ola de reacciones diplomáticas y ha reavivado las tensiones entre ambos países.
La vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez condenó lo que describió como “amenazas imprudentes” que socavan el comercio internacional y la libertad de navegación. En un comunicado oficial, Caracas acusó a Washington de intentar “apoderarse del petróleo y los recursos minerales de Venezuela” bajo el pretexto de proteger la seguridad mundial. El gobierno venezolano presentó una denuncia formal ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, instando a los Estados miembros a rechazar lo que calificó como “una maniobra imperialista y colonialista”.
Repercusiones legales y políticas
Expertos legales han advertido que el bloqueo podría ser interpretado como un acto de guerra según el derecho internacional. Un memorando del Departamento de Justicia estadounidense de 1961 ya había concluido que un bloqueo constituye un “acto beligerante” que solo es permisible en condiciones de guerra formal o de facto.
En Washington, varios legisladores han expresado su preocupación por la legalidad de la medida. El congresista Joaquin Castro criticó la decisión como “un acto de guerra no autorizado” y anunció una resolución del Congreso para restringir cualquier intervención militar con Venezuela. Se espera que la propuesta sea debatida esta semana.
Maduro llama a la solidaridad mundial
El presidente Nicolás Maduro respondió haciendo un llamado a los trabajadores del sector petrolero en todo el mundo para organizar protestas contra lo que calificó de “piratería moderna”. Hizo referencia a la reciente incautación de un buque petrolero venezolano que transportaba casi dos millones de barriles de crudo, calificando el hecho como “una violación del comercio internacional y de la paz marítima.”
Maduro acusó al presidente estadounidense Donald Trump de intentar “estrangular la economía venezolana mediante la coerción,” luego de que Washington designara al gobierno venezolano como una “organización terrorista extranjera.” Afirmó que el bloqueo no impedirá que su administración defienda la soberanía nacional.
Observadores internacionales advierten que esta disputa podría complicar aún más la tensa situación geopolítica en el Caribe, donde las alianzas y rutas comerciales siguen siendo estratégicamente importantes para ambos países.
