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Desempeño de la administración tributaria: el FMI presenta un balance mixto
Rabat, 27 de diciembre de 2025 — Siete años después de su última evaluación, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha publicado un nuevo análisis del sistema de administración tributaria de Marruecos, en el que destaca avances importantes junto con debilidades persistentes.
Realizada entre finales de septiembre y mediados de octubre de 2025 en el marco de una misión de asistencia técnica, esta evaluación es la segunda desde 2018. El informe reconoce mejoras claras en el funcionamiento de la Dirección General de Impuestos (DGI), aunque subraya que varios problemas estructurales continúan afectando su eficacia.
En 2024, en un contexto de crecimiento económico moderado del 3,2 %, la recaudación fiscal alcanzó los 343.700 millones de dírhams, lo que representa el 21,53 % del PIB. El impuesto al valor agregado sigue siendo la principal fuente de ingresos, con el 37 % del total, seguido del impuesto sobre sociedades (22 %) y del impuesto sobre la renta de las personas físicas (18 %). De los 32 indicadores analizados por el FMI, 18 muestran mejoras con respecto a 2018.
Entre los puntos fuertes señalados figura la modernización de las operaciones fiscales. La implantación de la plataforma digital SIMPL ha generalizado la declaración electrónica, hoy obligatoria para todos los contribuyentes, y más del 90 % de los trámites se realizan en línea. La gestión de riesgos también se ha fortalecido mediante el uso de herramientas basadas en el análisis de datos.
El FMI valoró igualmente los esfuerzos para mejorar los servicios al contribuyente, como portales digitales disponibles las 24 horas, una aplicación móvil, centros de atención telefónica y programas de educación fiscal en las escuelas.
No obstante, el informe identifica varias áreas de mejora. El registro de contribuyentes sigue afectado por retrasos en la eliminación de entidades inactivas, los niveles de cumplimiento en los plazos siguen siendo bajos y los atrasos fiscales se mantienen elevados. Además, los reembolsos del IVA presentan demoras y el contencioso tributario continúa caracterizándose por procesos largos y una independencia limitada.
Para el FMI, esta evaluación debe servir como motor de cambio. Constituye una base sólida para revisar el plan estratégico 2024–2028 de la DGI, con el objetivo de acercar la administración tributaria marroquí a las mejores prácticas internacionales y reforzar la confianza de los contribuyentes.
