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Escalan los enfrentamientos violentos durante las protestas antigubernamentales en Serbia
Las protestas antigubernamentales en Serbia se intensificaron el viernes por la noche, marcando el cuarto día consecutivo de disturbios en ciudades como la capital, Belgrado. La policía fue acusada de usar fuerza excesiva, lanzando gases lacrimógenos y enfrentándose con grupos rivales de manifestantes.
Se reportaron decenas de heridos y cientos de personas han sido detenidas desde el inicio de las manifestaciones. Las protestas, lideradas principalmente por estudiantes, comenzaron en noviembre tras el colapso de parte del techo de la estación de tren de Novi Sad, que causó la muerte de 16 personas, desatando indignación nacional por la corrupción y la negligencia en infraestructuras públicas.
El presidente Aleksandar Vučić defendió la actuación policial, afirmando la fortaleza del Estado frente a los manifestantes. Por su parte, el ministro del Interior, Ivica Dačić, negó los abusos y culpó a los manifestantes por provocar los enfrentamientos. Videos difundidos en redes sociales mostraron a la policía antidisturbios golpeando a los manifestantes con escudos y porras mientras se encendían bengalas en las calles.
Los choques involucraron a manifestantes antigubernamentales, simpatizantes del gobierno y policía antidisturbios. En Novi Sad, los manifestantes atacaron la sede del Partido Progresista Serbio, lanzando consignas y causando daños materiales. Las protestas exigen justicia para las víctimas de Novi Sad, elecciones anticipadas y el fin de la corrupción sistémica.
Observadores internacionales, incluido Alain Berset, secretario general del Consejo de Europa, han expresado su preocupación. Instó a las autoridades a respetar el derecho a la manifestación pacífica y a garantizar los derechos humanos y el estado de derecho.