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NSO Group adquirido por inversores estadounidenses, Friedman nombrado presidente ejecutivo
El fabricante israelí de software espía NSO Group, conocido por su polémico programa de vigilancia Pegasus, anunció que ha sido adquirido por un consorcio de inversores estadounidenses dirigido por el productor de Hollywood Robert Simonds. El exembajador de Estados Unidos en Israel, David Friedman, será el presidente ejecutivo de la empresa.
La transición de propiedad, anunciada por primera vez en octubre y finalizada recientemente, marca un punto de inflexión para la empresa de ciberseguridad. NSO confirmó que sus tres fundadores israelíes, Shalev Hulio, Omri Lavie y Niv Karmi, ya no poseen ninguna participación en la compañía. El acuerdo, valorado en decenas de millones de dólares, eliminó aproximadamente 600 millones de dólares de deuda que pesaban sobre NSO desde que fue incluida en la lista negra del Departamento de Comercio de los EE. UU. en 2021.
Friedman liderará la campaña para regresar al mercado estadounidense
Friedman, quien fue embajador de EE. UU. en Israel entre 2017 y 2021 bajo la administración de Donald Trump, se dirigió a los empleados de NSO en la sede de la empresa en Ramat Hasharon. Subrayó el papel crucial de la tecnología de NSO en el apoyo a los esfuerzos gubernamentales para combatir el terrorismo y el crimen grave.
“Los investigadores e ingenieros de NSO representan algunas de las mentes más brillantes de la extraordinaria industria tecnológica de Israel”, señaló Friedman, según The Times of Israel. “A pesar del escrutinio injusto al que se enfrenta la empresa, ustedes continúan trabajando incansablemente para proporcionar tecnología avanzada a quienes tienen la misión de proteger al público y salvar vidas”.
El principal objetivo de la nueva dirección es sacar a NSO de la lista negra del Departamento de Comercio de EE. UU., que prohíbe a las empresas estadounidenses hacer negocios con NSO sin la aprobación del gobierno desde noviembre de 2021. La administración Biden impuso estas sanciones tras determinar que NSO proporcionó software espía a gobiernos extranjeros que lo usaron para espiar a funcionarios gubernamentales, periodistas, activistas y diplomáticos.
El escándalo de Pegasus ensombrece la nueva propiedad
El software espía Pegasus de NSO, capaz de activar teléfonos de forma remota y extraer datos, ha sido vinculado a abusos de vigilancia en todo el mundo. Supuestamente, se ha utilizado para espiar a periodistas, defensores de derechos humanos y disidentes políticos en países como India, México, Marruecos, Polonia, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos. En mayo, un tribunal estadounidense ordenó a NSO pagar 167 millones de dólares en daños a Meta por piratear cuentas de WhatsApp, aunque la sanción fue reducida posteriormente.
Robert Simonds, conocido como fundador de STX Entertainment y productor de películas como Happy Gilmore y Hustlers, intentó adquirir NSO en 2023, pero renunció al consejo de administración tras el fracaso del acuerdo. Ahora, bajo su liderazgo, NSO planea continuar operando desde Israel bajo la supervisión completa del Ministerio de Defensa mientras se expande globalmente y busca restablecer su presencia en los EE. UU.
Las organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por la adquisición. John Scott-Railton, investigador principal de Citizen Lab, que ha investigado a NSO durante años, declaró a TechCrunch que la empresa “tiene un largo historial de acciones contrarias a los intereses estadounidenses y de apoyo a hackeos contra funcionarios estadounidenses”.
La nueva dirección de NSO enfrenta desafíos significativos, equilibrando su historia controvertida con los esfuerzos para recuperar la confianza en EE. UU. y otros mercados.
