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Nepal nombra a su primera primera ministra tras las protestas
Nepal ha designado a Sushila Karki como su primera primera ministra, después de una semana de intensas protestas que provocaron la caída del gobierno y la disolución del parlamento.
Karki, quien en 2016 ya había hecho historia como la primera mujer en ocupar el cargo de presidenta del Tribunal Supremo, juró el cargo el viernes. Dirigirá un gobierno interino hasta las elecciones previstas para marzo de 2026. Reconocida por su firmeza contra la corrupción, fue propuesta por representantes del movimiento de la Generación Z, protagonista de las movilizaciones masivas de los últimos días.
Las protestas comenzaron tras la imposición de una polémica prohibición de las redes sociales, lo que desató la indignación de miles de jóvenes ya cansados de la corrupción y el nepotismo de la élite política. La represión policial, que incluyó disparos con munición real, dejó al menos 21 muertos y convirtió la jornada en la más sangrienta en la historia reciente del país.
La tensión alcanzó su punto máximo cuando los manifestantes incendiaron edificios gubernamentales y obligaron al entonces primer ministro, KP Sharma Oli, a dimitir. Sin líderes claros entre los jóvenes, un grupo de representantes fue invitado a las negociaciones y propuso a Karki como jefa del gobierno interino, exigiendo también la disolución del parlamento.
Aunque al inicio hubo resistencia de los partidos tradicionales, la presión del ejército —que advirtió sobre un posible estado de emergencia— llevó a un acuerdo para nombrar a Karki y convocar elecciones el 5 de marzo de 2026.
Los líderes juveniles reclaman ahora investigaciones sobre la corrupción del anterior gobierno y sobre la represión que costó vidas humanas. Para muchos, la llegada de Karki simboliza un paso hacia una reconstrucción política tras años de frustración.