Marruecos Reafirma su Compromiso Inquebrantable para Defender los Derechos Humanos en el Escenario Global

La dedicación de Marruecos a la promoción de los derechos humanos a nivel mundial quedó claramente demostrada en el 2.º Seminario Internacional sobre Mecanismos Nacionales para la Implementación y Reporte de los Derechos Humanos, celebrado del 8 al 9 de mayo en Asunción, Paraguay. El evento contó con un discurso destacado de Nasser Bourita, Ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos, quien enfatizó la visión del Rey Mohammed VI de los derechos humanos como el "pilar de una sociedad moderna, justa y pacífica."

Las palabras de Bourita resaltaron la importancia del seminario, que siguió a un encuentro similar celebrado en Marrakech un año antes, subrayando el continuo compromiso de Marruecos para fomentar una red internacional dedicada a la implementación y reporte de los derechos humanos. Señaló que la convergencia de Marruecos, Paraguay y Portugal no fue "una coincidencia", sino "el resultado de un compromiso común con la promoción y protección de los derechos humanos."

En su discurso, Bourita reconoció el papel crucial que juegan los derechos humanos en varios proyectos nacionales, como el código de la familia, la Iniciativa Nacional para el Desarrollo Humano, el Modelo de Desarrollo para las Provincias del Sur, el Nuevo Modelo de Desarrollo y la generalización de la protección social. Indicó que estos proyectos están respaldados por una "sólida arquitectura institucional para los derechos humanos", según se establece en la Constitución de 2011.

El discurso de Bourita demostró el enfoque proactivo de Marruecos para involucrarse con los mecanismos internacionales de derechos humanos, caracterizado por una comunicación constante y transparencia con los organismos de derechos humanos. Este enfoque le ha valido al país reconocimiento internacional, culminando en su elección para la presidencia del Consejo de Derechos Humanos de la ONU para 2024. Marruecos recibió el respaldo de 30 de los 47 estados miembros, lo que simboliza un fuerte voto de confianza en su historial de derechos humanos.

Al asumir la presidencia de este prestigioso organismo global, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Marruecos calificó la elección como un testimonio de la "confianza y credibilidad inspiradas por la acción exterior de Marruecos" bajo el liderazgo del Rey Mohammed VI, tanto en África como en el escenario internacional. El compromiso de Marruecos con los derechos humanos, como principio central en sus actividades nacionales y globales, refuerza su papel como defensor de esta importante causa.