Marruecos enfrenta una grave escasez de médicos forenses en medio de la crisis sanitaria

El Ministro de Salud de Marruecos, Khalid Ait Taleb, reveló recientemente una grave escasez de médicos forenses en el país, un componente crítico del sistema de salud nacional. En un discurso ante el parlamento, el ministro declaró que Marruecos solo cuenta con seis médicos forenses, una estadística desalentadora que pone de manifiesto los desafíos que enfrenta el sistema de salud.

El Ministerio de Salud atribuye esta escasez crítica a la fuga de cerebros, un fenómeno que ha plagado durante mucho tiempo al sector médico marroquí. Los comentarios del ministro Ait Taleb, pronunciados el lunes, destacaron los agudos problemas en la medicina forense, un campo esencial para las investigaciones legales y la determinación de la causa de muerte.

La medicina forense abarca una variedad de funciones médicas, incluyendo la realización de autopsias para detectar enfermedades y proporcionar evidencia en casos legales. La falta de profesionales en este campo afecta tanto al sistema de justicia como a la salud pública.

La admisión franca del ministro llegó en respuesta a una consulta parlamentaria sobre la escasez de médicos forenses, especialmente en áreas remotas como Zagora. Ait Taleb explicó que, si bien la creación de más centros forenses o morgues podría parecer una solución, el problema real es la falta de médicos especializados. "Podemos crear morgues en todo Marruecos, pero no tenemos médicos forenses", comentó, enfatizando la gravedad del problema.

Además, señaló que la fuga de cerebros en el sector médico es significativa, y que se necesitan al menos cinco años de especialización después de seis años de educación médica para formar a un médico forense. Este período de formación prolongado, junto con la falta de atractivo del campo, ha llevado a un éxodo de profesionales calificados. "Los jóvenes se preguntan por qué elegir esta especialidad y cómo podría beneficiarlos", dijo Ait Taleb, señalando los desafíos de percepción.

El problema de la fuga de cerebros no se limita a los expertos forenses; se extiende a diversas especialidades médicas y otras profesiones. En 2022, el Ministro de Educación Superior, Abdellatif Miraoui, reveló que cerca de 3,700 profesionales marroquíes, incluidos médicos e ingenieros, abandonan el país cada año. Las estimaciones oficiales indican que alrededor de 700 médicos, entre 2,000 y 3,000 ingenieros y un sorprendente 30,000 trabajadores de la industria del turismo emigran anualmente en busca de mejores oportunidades.

La emigración de tantos expertos representa una pérdida "incalculable" para Marruecos, comentó Ait Taleb, haciendo eco de las preocupaciones del Ministro de Equipamiento, Nizar Baraka, quien recientemente señaló que el país pierde entre 600 y 700 médicos cada año.

El Tribunal de Cuentas del país publicó un informe condenatorio que destaca la disminución de recursos humanos en el sector de salud marroquí. A finales de 2021, el número de trabajadores de la salud por cada 1,000 personas en Marruecos era de solo 1.64, muy por debajo del mínimo de 4.45 necesario para cumplir con los estándares de las Naciones Unidas.

La crisis de fuga de cerebros se suma a los numerosos desafíos que enfrenta el sector sanitario de Marruecos, incluidos los constantes protestas de médicos, enfermeros y estudiantes de medicina. En las últimas semanas, estudiantes de facultades de medicina y farmacia en todo el país han protestado ferozmente contra las reformas del gobierno, en particular la decisión de reducir en un año la educación médica.

Mientras el gobierno insta a los estudiantes a terminar su huelga y salvar el año académico, la aguda escasez de médicos forenses es un recordatorio contundente de los importantes obstáculos que enfrenta el sistema de salud marroquí. Abordar esta crisis requerirá esfuerzos concertados y soluciones innovadoras para frenar la fuga de cerebros y fortalecer la fuerza laboral médica del país.