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Incertidumbre por la reapertura del cruce de Rafah en Gaza en medio de tensiones por el alto el fuego
La confusión persistía el miércoles sobre la reapertura del cruce de Rafah en Gaza, después de que las autoridades israelíes anunciaran que la frontera permanecería cerrada por motivos logísticos, a pesar de informes previos que apuntaban a una posible apertura para permitir la entrada de ayuda humanitaria.
Funcionarios israelíes explicaron que las inspecciones técnicas necesarias antes de reabrir el cruce aún estaban en curso. Mientras tanto, se programó la entrada de 600 camiones con ayuda humanitaria a Gaza a través del cruce de Kerem Shalom, un punto fronterizo cercano utilizado para operaciones comerciales y de socorro.
Más temprano, el medio público israelí KAN había informado que el gobierno permitiría la reapertura del cruce de Rafah para facilitar la entrada de ayuda desde Egipto hacia el enclave palestino. “Seis cientos camiones de ayuda humanitaria serán enviados a la Franja de Gaza por la ONU, organizaciones internacionales aprobadas, el sector privado y países donantes”, indicó el medio sin citar fuentes específicas.
La confusión surgió tras una serie de tensiones entre Israel y Hamás sobre la aplicación del acuerdo de alto el fuego. El martes, Israel había advertido que mantendría cerrado el cruce de Rafah, acusando a Hamás de incumplir los términos de la tregua, incluidos los relativos a la entrega de los cuerpos de rehenes fallecidos que aún permanecen en Gaza.
Según KAN, la decisión de reabrir Rafah fue tomada por la dirigencia política israelí después de que Hamás entregara los restos de cuatro rehenes adicionales el martes por la noche como parte del acuerdo de alto el fuego. Dicho acuerdo, mediado por el presidente estadounidense Donald Trump, establecía que Hamás debía devolver a todos los rehenes, vivos o muertos, dentro de las 72 horas posteriores al inicio de la tregua el viernes anterior.
Aunque el grupo liberó a los 20 rehenes vivos según lo previsto, Israel afirmó que solo había recibido los cuerpos de ocho de los 28 rehenes fallecidos hasta la noche del martes. El ministro israelí de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, advirtió que se suspendería la entrega de ayuda si Hamás no devolvía los cuerpos de los soldados israelíes restantes.
Los informes indicaron que la decisión de permitir el paso limitado de ayuda por Rafah también se tomó ante la expectativa de que Hamás entregaría otros cuatro cuerpos el miércoles, aunque el grupo aún no lo había confirmado.
Las Naciones Unidas y varias organizaciones humanitarias han instado reiteradamente a reabrir el cruce de Rafah, la principal vía de acceso humanitario de Gaza, ya que el enclave enfrenta una crisis devastadora tras dos años de conflicto desencadenado por el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023.
A finales de agosto, la ONU declaró que existían condiciones de hambruna en Gaza, afirmación que fue rechazada por Israel, que mantiene el control de los puntos de acceso y del flujo de ayuda al territorio.
