EE.UU. aprobará una inversión de $5 mil millones en la región del Sáhara de Marruecos
Estados Unidos avanza en un plan de inversión de $5 mil millones destinado a fomentar el desarrollo socioeconómico en las provincias del sur de Marruecos, ubicadas en la disputada región del Sáhara. La iniciativa subraya el continuo apoyo de Washington a la integridad territorial de Marruecos y su compromiso con un crecimiento inclusivo en la zona.
Este paso refuerza la asociación entre EE.UU. y Marruecos, consolidándose tras la decisión de Washington en 2020 de reconocer la soberanía marroquí sobre el Sáhara. La Corporación Financiera de Desarrollo de EE.UU. (DFC) ya ha comenzado a colaborar con bancos y empresas marroquíes para identificar proyectos prometedores.
Enfoque renovado en la inversión
Según African Intelligence, la administración Trump sentó las bases para fomentar la inversión de empresas estadounidenses en el Sáhara, una iniciativa que ha cobrado fuerza a pesar de la actividad limitada bajo la administración Biden. La DFC, con la aprobación de Washington, está explorando activamente oportunidades en la región junto con actores marroquíes.
El interés de EE.UU. en las provincias del sur de Marruecos se alinea con objetivos diplomáticos y económicos más amplios. En 2020, el exembajador estadounidense en Marruecos, David Fischer, anunció planes para abrir un consulado en Dakhla con el objetivo de facilitar inversiones que beneficien a las comunidades locales.
Un pilar de la visión de Marruecos
El Rey Mohammed VI ha defendido durante mucho tiempo el desarrollo de las provincias del sur de Marruecos, imaginando la región como un motor de progreso económico tanto a nivel regional como continental. Proyectos clave, como el puerto atlántico de Dakhla, reflejan la ambición de Marruecos de transformar el área en un eje de crecimiento.
EE.UU. ha respaldado este compromiso, con su nominado a embajador en Marruecos, Richard Duke Buchan III, reiterando recientemente su apoyo al Plan de Autonomía de Marruecos como la única solución viable para el conflicto del Sáhara. Durante su audiencia en el Senado el 30 de julio, Buchan destacó la importancia de facilitar un proceso político liderado por la ONU e instó a todas las partes a participar de manera constructiva.
Lazos estratégicos y cooperación en crecimiento
El plan de inversión de $5 mil millones destaca la profundidad de las relaciones entre EE.UU. y Marruecos, que se han fortalecido en los últimos años. Además de las asociaciones económicas, ambas naciones han colaborado en acuerdos de defensa e iniciativas diplomáticas.
El apoyo financiero y político de Washington para el desarrollo del Sáhara refuerza su papel como aliado clave en la región, consolidando aún más los lazos entre ambos países.