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Devastador Trami: Filipinas Lucha contra la Furía de la Tormenta
Filipinas ha sido devastada por la Tormenta Tropical Trami, dejando un rastro de destrucción y un creciente número de víctimas. Al menos 76 vidas han sido reclamadas, con la tormenta provocando deslizamientos de tierra catastróficos e inundaciones en las regiones centrales y del norte del país.
A medida que la furia de la tormenta disminuye, la verdadera magnitud de la devastación se hace evidente. Casi 320,000 personas se han visto obligadas a evacuar sus hogares, buscando refugio en centros de evacuación o con familiares. El impacto de la tormenta se ha sentido en diversos sectores, con puertos y aeropuertos interrumpidos, dejando a miles varados.
La Policía Nacional de Filipinas informó que 29 personas perdieron la vida en la región de Bicol debido a las aguas inundadas y deslizamientos de tierra. Además, un jefe de policía provincial confirmó que 47 muertes ocurrieron en la provincia de Batangas, principalmente debido a deslizamientos causados por Trami. Las intensas lluvias de la tormenta, que alcanzaron hasta dos meses de precipitación en solo 24 horas, abrumaron a las comunidades, provocando inundaciones repentinas y un desplazamiento generalizado.
Hasta el viernes, las secuelas de la tormenta continúan desarrollándose. Los puertos siguen congestionados, con 7,510 pasajeros aún esperando su turno para partir. Treinta y seis vuelos han sido cancelados, lo que agrava aún más los desafíos de transporte.
En la provincia de Albay, las laderas del Volcán Mayon presenciaron una escena aterradora cuando barro y escombros se precipitaron, engullendo casas y vehículos en poderosos flujos de barro. Los vientos sostenidos de la tormenta, que alcanzaron hasta 95 km/h (59 mph) y ráfagas de 115 km/h (78 mph), aumentaron la fuerza destructiva.
Filipinas, un archipiélago situado entre el Océano Pacífico y el Mar de China Meridional, no es ajena a tales tormentas. Anualmente, soporta aproximadamente 20 tormentas y tifones. Solo el mes pasado, la Tormenta Tropical Yagi reclamó al menos 11 vidas, sirviendo como un sombrío recordatorio de la vulnerabilidad del país ante estos desastres naturales.
Este trágico evento sirve como un recordatorio contundente del impacto devastador de los eventos climáticos extremos y la urgente necesidad de estrategias efectivas de mitigación y respuesta ante desastres. A medida que Filipinas comienza el largo camino hacia la recuperación, el mundo observa con el corazón pesado, ofreciendo apoyo y solidaridad.
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